Las bodas en destinos como Cancún y la Riviera Maya siguen conquistando corazones, y cada temporada trae nuevas formas de embellecer estas celebraciones al aire libre. Este año, la clave está en combinar lo natural con lo sofisticado.
Paletas neutras y texturas orgánicas: Los tonos arena, terracota y blanco roto están en tendencia. Se complementan con materiales como lino, yute y madera natural, que armonizan con el entorno y crean una estética elegante sin esfuerzo.
Iluminación cálida y detalles personalizados: Guirnaldas de luces, faroles bohemios y velas flotantes están marcando pauta. A eso se suman detalles personalizados como menús caligrafiados a mano, mesas con nombre y regalos eco-friendly para los invitados.

